Doblete de Harry Kane da triunfo al Tottenham
Tottenham sufrió ante el recién ascendido Aston Villa pero Kane rescató a los Spurs en los minutos finales
GOAL
La Premier League es emocionante desde su primer partido hasta el último. Y eso quedó comprobado este sábado en el duelo entre Tottenham y Aston Villa en Londres. Hubo opciones de ambos lados, grandes atajadas, vehemencia, rapidez y mucho frenesí en un duelo que terminó 3-1 a favor de los locales gracias al doblete de Harry Kane, de la figura que evitó la pérdida de puntos en casa.
La historia comienza con un pelotazo y un contragolpe del visitante, del equipo recién ascendido. John McGinn aguanta el balón, se toma un segundo más para dejar a su marcador regado y remata cruzado para el silencio de la fanaticada de los Spurs. Golazo por la manera en la que solucionó todo en espacio reducido, por la capacidad de pensar y solventar todo de la major manera.
La historia sigue con Tottenham volcado al ataque, con el rival agolpado en su propia cancha, con dos líneas de cinco y rechazando todo sin importar adonde. El tanto, tempranero (minuto nueve) hizo del duelo algo frenético por la obligación de los dirigidos por Mauricio Pochettino.
Terminó la primera parte y el empate no llegó. Empezó la segunda y tampoco. Y empezaron a pasar los minutos, y la claridad se perdió por los nervios de tener que atacar. Harry Kane tomó el liderazgo, Lucas intentó hacer una de las suyas, pero nada salió.
Hasta que en el 73’, en una de las tantas acciones de ataque, Tanguy Ndombele quedó de frente al arco y con el borde interno de su pie derecho puso el balón en el palo más lejano de Tom Heaton, figura del día por las veces que atajó pelotas de gol.
Ese remate generó la alegría de los hinchas y de Pochettino en el banco, pues el fantasma de una derrota en casa se esfumó. Y los Spurs siguieron y lograron el premio al ser los únicos que tuvieron iniciativa en la segunda parte.
Kane tomó la pelota, luego de una gran jugada de Erik Lamela, y la mandó al fondo de la red en el 87’. Nada pudo hacer Heaton para contener la potencia del remate. Y ya no fue alegría sino algarabía. Pero la cosa no terminó ahí, pues en el 90 Kane, con la tranquilidad que lo caracteriza, marcó el 3-1, su doblete, y cerró la historia.
Tottenham salvó un duelo que, en principio, parecía perdido. Los de Londres festejaron tres puntos y demostraron que cuando juegan en casa no dan nada por hecho, que luchan hasta el final por salir airosos. Y este sábado sí que lo lograron.