El entrenador del Bayern, Thomas Tuchel, que ya no estará en el banquillo del equipo la próxima temporada, afirmó este lunes que no piensa en un fin anticipado de su carrera en el club bávaro o un "partido final" para él si queda eliminado este martes de la Liga de campeones ante el Lazio.

La presión sobre Tuchel es enorme, pues se juega su futuro en el estadio Allianz de Múnich y la clasificación del Bayern para los cuartos de final de la liga de campeones. El partido de este martes ya ha sido denominado por la prensa alemana como el "partido final" para el entrenador.

El propio técnico no piensa en el fin de su trayectoria en el Bayern. "Al menos no de mi parte", recalcó en la rueda de prensa previa al partido con el Lazio.

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"No sé lo que piensan los demás en el club", pero "pueden estar seguros de que nadie tiene más ambiciones que yo de ganar el partido mañana", recalcó Tuchel.

"Para mí es muy importante ganar. Soy un mal perdedor y lidio mal con esto a nivel personal", admitió. Pero, añadió, "todo es una lección para un entrenador, aún cuando en este momento y en las últimas semanas ha sido difícil para mí ver los lados positivos de esta profesión".

Tuchel cree que la adversidad le hace crecer a diario y que es importante permanecer positivo. El fútbol, recalcó, es, al fin al cabo, "su mayor pasión, su gran amor".

"Daré el 100 % y más, hasta el último partido con el Bayern. Para que tengamos el mejor resultado posible. Las cosas son difíciles, pero están ahí para crecer. Es lo que me exijo a mí mismo", enfatizó.

El entrenador del Bayern aspira a no encajar ningún gol en casa contra el Lazio y como receta recomienda a los jugadores ser más tenaces en los duelos y tener más "vida" en la estructura del juego.

"Tenemos que ser más tenaces en los duelos", dijo Tuchel en una rueda de prensa, en la que también pidió un juego más disciplinado y más concentración en los pases".

"Mañana cada minuto cuenta", señaló el alemán, que no seguirá en el banquillo la próxima semana.

Indicó que el delantero Serge Gnabry aún no ha recuperado el ritmo, ya que ha estado muchos meses fuera de juego, pero hay buenas noticias para otro jugador: Leroy Sané podría volver a jugar tras una lesión que le apartó del campo contra el Friburgo.

Tuchel explica que el extremo no está completamente libre de dolores y "hace tiempo que no juega sin dolores". "Pero suponemos que estará en la plantilla y jugará".

"Necesitamos un rendimiento sobresaliente" contra el Lazio, un rival fuerte que exige al Bayern jugar "más agresivos y con convicción".

Tuchel admitió que en la ida en Roma cometieron demasiados errores en el segundo tiempo.