André-Pierre Gignac se Prepara para un Nuevo Capítulo con los Tigres
A los 39 años, André-Pierre Gignac, una de las figuras más emblemáticas del fútbol mexicano, se alista para dar un giro en su carrera. Tras una exitosa trayectoria como delantero de los Tigres de Monterrey, el francés ha anunciado su intención de continuar una temporada más sobre el campo antes de tomar las riendas del club en una nueva faceta como dirigente.
Gignac: Un Futuro Prometedor en la Dirección Técnica
Cuando Gignac aterrizó en México en 2015, muchos cuestionaron su decisión de unirse a un campeonato menos reconocido, especialmente al tratarse de un jugador que estaba en pleno auge a nivel europeo. Sin embargo, la apuesta resultó ser un éxito rotundo. Con los Tigres, el delantero se convirtió en leyenda, disputando más de 400 partidos, anotando 219 goles y ganando títulos como la Liga de Campeones de la CONCACAF en 2020.
Ahora, con la finalización de su carrera como jugador a la vista, el francés está listo para dar un paso hacia una nueva etapa en la estructura del club. "Me siento capaz de jugar una temporada más y todavía tengo fuerzas. Creo que aún puedo contribuir", comentó Gignac tras su último rendimiento en el torneo apertura. Sin embargo, su mente ya está enfocada en lo que vendrá después del retiro.
De Jugador a Líder: El Nuevo Rol de Gignac
Aunque la despedida de los campos parece inminente, Gignac no teme al futuro. "Al principio de mi carrera pensaba en ser entrenador, pero con el tiempo me resulta estimulante formar parte de una junta directiva que quiere seguir ganando títulos, campeonatos y expandirse internacionalmente", expresó. Con su alma ya comprometida con los Tigres, Gignac tiene grandes planes para su futuro dentro del club.
Tigres anunció en diciembre que el veterano delantero ocupará el cargo de "presidente deportivo", un rol clave en la supervisión de todos los aspectos deportivos, por encima del director deportivo, cargo que recaerá en Guido Pizarro, ex compañero de Gignac y actual manager del club. Aunque en un principio se había barajado la opción de que Gignac asumiera un puesto como entrenador, parece que su pasión por la gestión deportiva y el desarrollo del club lo ha llevado por otro camino.
A medida que se acerca el fin de su carrera, Gignac se ha comprometido a dejar un legado duradero, no solo en el campo, sino también en la dirección del club. Con su liderazgo y visión, parece que los Tigres de Monterrey están listos para continuar su éxito y consolidarse como uno de los clubes más fuertes de México y más allá.