Era prácticamente cuestión de tiempo para que se concretara la salida de James Rodríguez del Rayo Vallecano, donde nunca encontró un lugar, pero tampoco dejó de hacer lo que le correspondía como el futbolista profesional que es.

Se oficializó la salida del colombiano del equipo de la capital española. Según diversos medios, el internacional cafetero renuncia a una parte proporcional del contrato que le quedaba por percibir hasta el próximo 30 de junio, fecha en la que caducaba su contrato, mismo que contenía una cantidad que superaba el millón de dólares brutos.

¿Por qué James dejó al Rayo Vallecano?

Uno de los principales objetivos del colombiano era regresar a Madrid, y aunque no fue con el Real Madrid (el equipo más grande de la capital española) lo hizo con el Rayo en busca de retomar su mejor versión en una de las competiciones más exigentes del planeta.

Pero los planes fueron cambiando conforme pasó el tiempo. Ni James pudo brillar, ni su técnico cedió ante su posición de mantenerlo alejado de la actividad, a pesar de que nadie puede poner en jaque el talento que tiene el número "10".

La llegada de James al equipo fue una apuesta de la presidencia que nunca logró convencer a Íñigo Pérez, quien optó por no aprovechar las cualidades técnicas del colombiano priorizando un bloque más defensivo.

Lo que deja James en el Rayo Vallecano

El atacante colombiano se marcha del equipo con siete partidos oficiales disputados, con una sola asistencia en la Copa del Rey. Un rendimiento muy alejado de lo que pudo haber dado en caso de contar con más minutos. Ahora, buscará nuevos retos que lo acerquen al nivel que busca de cara a un Mundial que viene en camino en 2026.