La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha anunciado una modificación importante en el formato de la Supercopa de España, tanto masculina como femenina. A partir de ahora, si un partido termina empatado tras los 90 minutos reglamentarios, no habrá tiempo extra, y el ganador se decidirá directamente mediante una tanda de penaltis.

Este cambio, aprobado por la Comisión Delegada de la RFEF, responde a la necesidad de reducir la carga física sobre los jugadores, algo que los clubes habían solicitado con insistencia. La eliminación de la prórroga sigue la tendencia ya adoptada en competiciones como la Copa del Rey y la Copa Federación, y está en línea con lo que ocurre en otros torneos internacionales.

En las últimas ediciones de la Supercopa, varios partidos se extendieron más allá del tiempo reglamentario, incluyendo las semifinales de 2023 y 2024, donde se vieron encuentros resueltos en la prórroga o incluso en los penaltis. Con el nuevo formato, se busca aligerar el calendario y evitar el desgaste adicional que suponen los tiempos extra, priorizando la decisión rápida en los penales cuando no haya un ganador en los 90 minutos.

Este ajuste marca un antes y un después en el fútbol español, aligera la agenda de los equipos y asegura que los partidos se definan con mayor rapidez.