A estas alturas, con 17 medallas de oro durante sus 20 participaciones en los Juegos Olímpicos, nadie duda de que Estados Unidos es el rey del baloncesto. Sin embargo, cada día es más evidente que están surgiendo estrellas desde otras partes del mundo que están poniendo en duda el talento individual de sus jugadores en la NBA… hasta el punto de que, por séptimo año consecutivo, ningún jugador nacido en Estados Unidos ganará el MVP de la temporada.

Siete años sin un MVP de la NBA nacido en Estados Unidos

Anoche, entre otros numerosos premios, la NBA presentó su listado de tres candidatos para llevarse el premio como MVP de la temporada regular: Shai Gilgeous-Alexander (Oklahoma City Thunder), Nikola Jokic (Denver Nuggets) y Giannis Antetokounmpo (Milwaukee Buck). Una decisión que ha vuelto a poner de manifiesto el déficit de estrellas con las que cuenta Estados Unidos para presentar su candidatura al MVP de la temporada.

Ahora mismo, las apuestas reflejan que el favorito para llevarse el galardón es Shai Gilgeous-Alexander… y no es de extrañar. El base de Oklahoma City Thunder ha sido el líder del equipo con mejor récord de victorias (68) esta temporada. Para hacernos una idea, han establecido el mayor número de victorias en temporada regular de la NBA desde las 73 de los Warriors en 2019 y, además, han marcado un nuevo récord de victorias para Oklahoma. Algo que parecía inviable desde la desintegración del ‘Big Three’ formado por Durant, Westbrook y Harden.

Harden es el último estadounidense que ganó el MVP de la NBA

Precisamente, fue James Harden el último jugador estadounidense que ganó el MVP de la temporada en la NBA. Fue en el año 2018 cuando todavía jugaba para Houston Rockets. Desde entonces, todos los premios han sido otorgados a jugadores extranjeros. Giannis Antetokounmpo lo ganó dos veces consecutivas (2019 y 2020), Jokic hizo lo propio las siguientes dos temporada (2021 y 2022) para luego repetir en 2024… justo un año después de que Embiid se hiciese con el galardón (2023).

A decir verdad, este premio sólo refleja el rendimiento individual… mientras que Estados Unidos continúa gobernando el mundo del baloncesto a nivel global. Las medallas de oro en los Juegos Olímpicos así lo refleja. Pero es evidente que Estados Unidos está empezando a tener un problema a la hora de generar superestrellas cuando, hasta el último MVP de Harden en 2018, sólo tres jugadores extranjeros habían conseguido ganar el galardón: Hakken Olajuwon (que más tarde se nacionalizó), Steve Nash (Canadá) y Dirk Nowitzki (Alemania).